Analizan brechas y oportunidades en el cultivo de algas

Innova Puerto Montt analiza desafíos y oportunidades del cultivo de algas, destacando regulación, I+D y modelos regenerativos.

Innova Puerto Montt realizó un nuevo taller del ciclo 2025, esta vez dedicado al cultivo y la valorización de algas marinas, con presentaciones de investigadores, empresas biotecnológicas y actores vinculados al desarrollo de modelos regenerativos. La actividad, desarrollada en conjunto con el Centro I-Mar de la Universidad de Los Lagos, permitió revisar el estado del sector, los desafíos regulatorios, tecnológicos y productivos, y el potencial de nuevos modelos de negocio ligados a la economía oceánica.

La apertura estuvo a cargo de Alejandro Buschmann, académico de la Universidad de Los Lagos e investigador del Centro I-Mar, quien entregó una panorámica del avance global y local del cultivo de algas y los principales cuellos de botella que frenan su expansión en Chile. En su presentación advirtió sobre la necesidad de ajustar las expectativas frente al entusiasmo internacional por la biomasa marina: “Es necesario siempre analizar con los pies bien en la tierra, porque hay muchas cosas que a veces se dicen y no son tal como se creen” . También subrayó que la regulación actual replica exigencias diseñadas para la salmonicultura y no para macroalgas: “La acuicultura de algas no tiene nada que ver con la acuicultura de salmones… todas las regulaciones basadas en producción animal no nos sirven” .

El segundo bloque fue presentado por Jaime Zamorano, Director Ténico de Gelymar, quien abordó el valor económico de las algas rojas y su rol en la producción de hidrocoloides. Explicó las dinámicas de precios, los rendimientos de carragenina y los cambios en la pesca y recolección local. Enfatizó que el país aún no logra consolidar un cultivo competitivo que permita escalar y bajar costos frente a la oferta asiática: “Las carrageninas de algas chilenas resultan más caras… podría la acuicultura generar una escala y una facilidad de recolección que baje los costos y permita competir mejor” . También destacó la relevancia social del rubro al recordar que “más de 4.000 personas trabajan durante la época estival solo en las algas”.

Finalmente, la cuarta charla fue dictada en formato conjunto por María José De La Fuente, cofundadora de Huiro Regenerativo, y Rebeca Gálvez, CEO de Patagonia Biotecnología. Gálvez subrayó el potencial del país para desarrollar productos de mayor valor agregado a partir de recursos locales. Su presentación puso énfasis en la necesidad de colaboración entre industria, ciencia y emprendimiento: “Tenemos la tendencia de pensar que las cosas que vienen de afuera son mejores, y a veces no nos damos cuenta del talento que hay en Chile” . También remarcó que el país posee ventajas únicas gracias a su costa, su biodiversidad y el conocimiento científico acumulado.

En tanto, De La Fuente expuso la urgencia de avanzar hacia modelos que integren producción y restauración ambiental: “Si seguimos viendo el mar como una despensa infinita, vamos a terminar vaciándolo… hoy la sostenibilidad ya no basta; necesitamos modelos regenerativos” . Presentó además el trabajo del instituto en cultivo de Macrocystis pyrifera, destacando procesos de hatchery, selección de cepas y colaboración con empresas para mejorar trazabilidad y suministro.

El cierre estuvo conducido por Adolfo Alvial, secretario ejecutivo del Plan Innova Puerto Montt, quien valoró el tono colaborativo del encuentro y su relevancia para la agenda del plan. “De lo que se trata en el Plan Innova Puerto Montt es colaboración y es potenciar las capacidades notables que tiene esta comuna y la región” . También recordó que las algas forman parte de los ejes estratégicos asociados a alimentos y que el ciclo 2025 concluyó con este taller, tras sesiones dedicadas a emprendimientos, inteligencia artificial generativa y protección de datos.

El encuentro cerró con un espacio de diálogo abierto, donde expositores y asistentes coincidieron en que el avance del cultivo de algas en Chile requiere resolver trabas normativas, aumentar capacidades de I+D y consolidar alianzas que permitan escalar la producción sin sacrificar la sostenibilidad ecológica.