Incorporación del turbot a sistemas RAS
La incorporación de sistemas de recirculación permite optimizar el cultivo de turbot, mientras el conocimiento técnico acumulado abre nuevas líneas de trabajo con especies marinas nativas y de interés local.
Uno de los pasos más ambiciosos que ha dado recientemente la Unidad de Producción Acuícola (UPA) en torno al cultivo de turbot es su ingreso al mundo de los sistemas de recirculación de agua de mar, conocidos como RAS por sus siglas en inglés (Recirculating Aquaculture Systems). Esta nueva línea de trabajo surge a partir de una colaboración con una empresa privada especializada en tecnología RAS, que se acercó al centro de Metri luego de realizar una gira técnica por Europa en busca de especies con potencial comercial para ser cultivadas bajo ese sistema.
La sorpresa de esta empresa fue descubrir que el turbot, una especie que habían identificado como estratégica para diversificar su producción, ya se cultivaba en Chile, y a escasos kilómetros de Puerto Montt. A partir de ese hallazgo, se concretó un convenio de colaboración con la UPA, que permitió postular y adjudicarse un proyecto ANID (ex-FONDEF). La iniciativa se encuentra actualmente en fase de implementación y se espera que entre en operación hacia el mes de junio de este año.
El uso de sistemas RAS conlleva múltiples ventajas. Una de las más relevantes en el contexto chileno es la posibilidad de reducir los altos costos energéticos asociados al bombeo de agua de mar, especialmente en zonas como Metri, donde existen diferencias de marea de hasta siete metros. Al trabajar con un 95% de recirculación, el sistema solo renueva un pequeño volumen de agua, lo que permite ahorrar energía y mantener condiciones más estables.
Otra ventaja clave es el control de la temperatura, factor crítico para el crecimiento del turbot. En el sistema RAS, será posible elevar y mantener la temperatura en rangos óptimos de 14 a 15°C, lo que permitiría acortar el ciclo productivo total en varios meses.
Desde el punto de vista sanitario, los sistemas RAS ofrecen condiciones mucho más controladas, tanto en la prevención de enfermedades como en la gestión de residuos. Aunque el turbot ya ha demostrado ser una especie particularmente resistente, pues sus características fisiológicas, como la presencia de piel en lugar de escamas, le confieren una mayor protección frente a patógenos comunes en ambientes marinos como caligus o SRS.
Expansión a especies nativas
Aunque el turbot ha sido el eje central del trabajo desarrollado por la Unidad de Producción Acuícola (UPA), uno de los propósitos fundacionales del proyecto fue también adaptar el conocimiento técnico adquirido a especies marinas nativas o endémicas del sur de Chile. Este enfoque ha dado origen, a lo largo de los años, a diversas experiencias con peces como la corvina y el róbalo.
Pineda explica que, si bien estos cultivos no han alcanzado una escala productiva, el trabajo ha sentado una base sólida para futuras iniciativas productivas, tanto públicas como privadas. Una muestra concreta de esa articulación es la colaboración con la empresa Colorado Chile, que ha desarrollado experiencia en el cultivo de congrio colorado en el norte del país y que ahora busca extender esa práctica al sur. La alianza contempla el traslado de los primeros reproductores a las instalaciones del centro de Metri para iniciar un proceso de desarrollo técnico local, enfocado en sistemas de acuicultura a pequeña escala y repoblamiento.
“Durante este semestre deberíamos tener los primeros reproductores en el centro”, anticipa Pineda, quien destaca que esta colaboración no solo permite diversificar el trabajo de la UPA, sino también explorar soluciones productivas aplicables a realidades locales, incluyendo cultivo en pequeña escala y conservación de especies nativas.
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