Desde los fiordos del sur de Chile hasta Noruega: trabajadores de Grupo Salmovac emprenden gira tecnológica
En el corazón del sur austral de Chile, entre fiordos, archipiélagos y centros de cultivos de salmones, que sustentan una de las principales industrias del país, ha emergido un grupo empresarial que combina innovación, arraigo territorial y visión de futuro.
Lo que comenzó en 2002 como un pequeño emprendimiento familiar enfocado en la inoculación de peces salmonídeos fue creciendo al ritmo de la industria acuícola. Con el tiempo, Salmovac Ltda. no solo se consolidó como un referente en servicios especializados para el bienestar y sanidad de los peces, sino que también detectó una necesidad crítica y desatendida en los mares del sur, el abastecimiento y cabotaje seguro de combustibles.
La adquisición de una embarcación con permisos para cargas peligrosas dio origen a una nueva línea de negocios: Guaiteca Austral S.A., empresa hermana encargada de distribuir combustible, primero a centros de cultivos y luego también a comunidades costeras más aisladas. Hoy abastece a más de 23 islas del archipiélago de Chiloé, Ayacara, Melinka y Puerto Aguirre, en alianza con su socio estratégico Esmax, líder en la distribución de combustible en los puertos del sur de Chile. Paralelamente, con un fuerte enfoque en la seguridad y cumplimiento normativo, comenzaron a construir buques tanques, especialmente diseñados para operar en estos entornos complejos.
Poco después, Naviera Kool se sumó como el brazo logístico especializado en el cabotaje marítimo de combustibles, consolidando un ecosistema operativo que va desde el bienestar animal hasta la energía que ilumina hogares donde el mar es la única carretera.
Hoy, estas empresas se presentan unidas bajo el nombre de Grupo Salmovac y en elmarco de su constante evolución, se preparan para visitar AquaNor 2025, la prestigiosa feria de tecnología acuícola que se realizará en Trondheim, Noruega.
Una empresa que ve crecer a sus colaboradores.
Pero este viaje tiene un valor que trasciende lo técnico y lo empresarial. Es un reconocimiento a quienes con su trabajo, compromiso y profesionalismo han sostenido esta historia durante más de dos décadas.
En un mundo donde la innovación muchas veces se mide solo en cifras, iniciativas como esta recuerdan que el capital humano sigue siendo el motor más importante de cualquier organización. Cuando una empresa echa raíces en su territorio, se convierte en parte esencial del tejido social que la rodea, generando empleos, abasteciendo comunidades y contribuyendo al desarrollo de zonas históricamente aisladas. Y cuando, además, reconoce a sus trabajadores con gestos concretos, el sentido de pertenencia trasciende lo laboral.
Así lo vive Pablo Alvarado, patrón de nave, uno de los seleccionados para esta experiencia: “Cuando me avisaron, me costó creerlo. Pero después, hablando con don Michael, ya lo tomé en serio. Fue una tremenda sorpresa”, cuenta. Con siete años en la empresa, destaca el valor del gesto: “Es difícil encontrar empresas que entreguen este tipo de oportunidades. Le pongo nota 10. Es una compañía estable, seria, que se preocupa de su gente. Estoy agradecido de que hayan pensado en mí”.
Una visión similar tiene Hernán Yáñez, supervisor de manejo de peces, quien ha vivido gran parte de su vida junto a Salmovac: “Llevo más de 20 años acá. Aquí conocí a mi señora, formé mi familia. La empresa siempre ha sido correcta conmigo, y uno responde también con compromiso. Hay una relación de confianza”. De cara al viaje, tiene claro qué busca: “Quiero observar de cerca cómo se hace acuicultura en Noruega. Comparar, aprender, ver qué cosas podemos replicar acá. Siempre hay algo que se puede mejorar”.
El entusiasmo también es evidente en Mitchell Ceriche, mecánico, quien afronta su primer viaje fuera del país con emoción: “Cuando me avisaron, sentí nervios y alegría al mismo tiempo. Me dijeron que era un reconocimiento, y eso me dio mucho orgullo”. Con ganas de absorber todo lo posible, agrega: “Tengo muchas expectativas de ver cómo trabajan allá, de aprender. No sé si tendría otra oportunidad como esta, así que quiero aprovecharla al máximo”.
Para Néstor Vargas, patrón de nave menor, la noticia fue un motivo de orgullo profesional: “Nos dedicamos al cabotaje de combustible, un trabajo clave en zonas donde no hay caminos, solo mar. Esta invitación demuestra que la empresa reconoce ese esfuerzo”. Con experiencia previa en viajes, comenta: “Ahora se trata de algo distinto: viajar para conocer otras formas de trabajar, entender cómo lo hacen en Europa. Queremos ver qué ideas podemos traer para seguir creciendo como grupo”.
En tanto, para Antonio Ojeda, patrón de la nave menor Konge, recibió la invitación con orgullo y gratitud: “Sentí un orgullo inmenso al saber que me habían considerado para esta gira internacional. Eso demuestra que estamos haciendo bien nuestro trabajo, pero no es mérito solo mío, sino de toda la tripulación. La empresa ha sido un sustento para mi familia y para mí, y no me queda más que agradecer”. De cara al viaje, tiene clara su motivación: “Quiero conocer y traer la experiencia que tienen en Noruega en salmonicultura, ver las diferencias con Chile y aprender de lo que hacen allá para seguir mejorando”.
En esta ocasión, grupo Salmovac estará representado por una delegación compuesta por ocho colaboradores y tres de sus ejecutivos: Claudio Vennekool, Gustavo Vennekool y Michael King. Estos líderes no solo encabezarán la comitiva, , sino que también representan la continuidad generacional y la visión estratégica de carácter familiar que distingue la compañía.
Para Claudio Vennekool, gerente General, el sentido de este viaje va más allá de la agenda técnica. “En el marco de nuestro viaje, nos acompañan colaboradores que llevan más de una década en la compañía, lo que hace de esta invitación un merecido reconocimiento a su esfuerzo, compromiso y lealtad. Es, sin duda, un premio por hacer las cosas bien. Este viaje tiene un sentido muy especial para mí. Deseo que nuestros colaboradores vivan una experiencia similar a la que yo tuve en 1996, cuando era jefe de área en Salmones Pacífico Sur Ltda. Liderada por Don Humberto y Claudio Fischer, me dieron la oportunidad de viajar a Noruega y Escocia para conocer distintas pisciculturas; esa experiencia marcó un hito en mi vida profesional: “se me abrió el mundo’”.
Sobre el itinerario, Claudio Vennekool precisó que “nuestra ruta comenzará en Hamburgo, Alemania, donde visitaremos astilleros en el río Elba. Luego, nos trasladaremos a Trondheim, Noruega, para asistir a la feria AquaNor, uno de los eventos más importantes de la industria acuícola a nivel mundial. Durante la feria, visitaremos empresas transnacionales que son tanto proveedores como clientes nuestros, entre ellas Inter Ship, Scale, FLS, Imenco, salmoneras que operan en Chile, entre otras. Además, contaremos con el apoyo de ProChile, que ha programado visitas de interés para nuestros trabajadores”.
En sus palabras, “es un verdadero orgullo ser un eslabón en la cadena de valor de esta gran industria salmonera. Formamos parte de una industria que ha sabido crecer con responsabilidad, priorizando la seguridad y bienestar de sus trabajadores, el cuidado del medio ambiente y la colaboración con proveedores y servicios.
Esperamos volver con nuevas ideas, motivados a seguir mejorando día a día. Como Grupo Salmovac estamos orgullosos de pertenecer a la industria salmonera de Chile”.
Así, esta gira no solo permitirá conocer tecnología de punta en el corazón de la acuicultura noruega, sino también fortalecer la identidad de un grupo humano que ha hecho posible un modelo empresarial único: comprometido con la calidad, la seguridad y el territorio.
No todos los días se cruza el océano para visitar ferias tecnológicas o astilleros. Este viaje será también una experiencia de vida. Un espacio para aprender, compartir, mirar con otros ojos el trabajo diario, con la certeza de que el esfuerzo vale la pena, porque es visto, valorado y reconocido.